A pesar del contexto de reducidos tipos de interés, moderado crecimiento del crédito y creciente presión regulatoria, el sistema bancario español continuó manteniendo a lo largo de 2017 una posición sólida, con rentabilidades superiores a la media europea y una morosidad en descenso continuado, lo que permitió a sus gestores seguir con sus procesos de innovación y digitalización, avanzando hacia modelos de relación cada vez más virtuales con sus clientes, tanto particulares como de empresa.En 2017 se cumplieron 10 años del inicio de la crisis financiera mundial y cinco del rescate del sistema financiero español con el que se abrió un histór
La reactivación económica devolvió el dinamismo a la financiación de las empresas, que a lo largo de 2017 demandaron crédito para afrontar nuevos retos de inversión, vinculados sobre todo a la industria 4.0 y a la internacionalización. Las entidades bancarias mantuvieron su hegemonía en la concesión de apoyo financiero a la pyme, compartiendo el negocio con las sociedades de garantía recíproca, préstamos participativos, capital riesgo y también con el ‘crowdfunding’, la fórmula de financiación más novedosa y disruptiva.Que el cambio de tendencia en el ámbito de la financiación es un hecho lo atestiguaba el presidente de Elkargi, Josu Sánche
