El pasado 28 de abril se produjo en la península ibérica un evento sin precedentes. Un cero energético o coloquialmente denominado ‘apagón’, del cual todavía se desconocen las causas reales que lo provocaron. Las principales hipótesis incluyen un desequilibrio crítico entre la generación y la demanda eléctrica, que resultó en una pérdida súbita de 15 GW de generación, que produjo una fuerte desviación de la frecuencia en el sistema eléctrico español y que acabó por colapsar completamente el sistema eléctrico. Lo que sí se conocen son los efectos que ha tenido el apagón en el tejido empresarial vasco. Dicho evento fue una prueba inesperada pa