Anticiparse y actuar proactivamente ante los cambios acelerados, y generar contextos donde las personas puedan aportar lo mejor de sí, y sean capaces de aprender continuamente es el principal reto de las empresas y sociedades para ser competitivas y garantizar el bienestar de todos. Esto requiere que todos los agentes territoriales -empresas, escuelas, universidades, administración pública, entidades sociales etc.- pongan el foco, de verdad, en las personas, y faciliten tanto la generación de valores -compromiso, esfuerzo, generosidad y solidaridad-, como el desarrollo del potencial que tiene cada persona.
¿Habrá más o menos trabajo que en la actualidad?, ¿Cuál será el nuevo paradigma del reparto de la riqueza generada en un sistema productivo y laboral futuro?... Aunque las posiciones e informes especializados sobre el futuro del trabajo no son unánimes, todo indica que en los próximos años asistiremos a incrementos de la productividad y de generación de riqueza que no comportarán necesariamente elevados ritmos de creación de empleo. En ese nuevo contexto que muy probablemente transformará la situación actual del mercado de trabajo, a Lanbide le corresponderá prestar servicios innovadores adaptados a ese nuevo escenario.