La Diputación Foral de Bizkaia refuerza su defensa frente a los incendios forestales y activa un plan integral para 2026
El plan activa 365 días al año un dispositivo especializado con 15 técnicos directores de extinción, 15 retenes, ocho parques de bomberos y 200 kilómetros de trabajos preventivos
- Estrategia Empresarial
- 13-Noviembre-2025
Arantza Atutxa, diputada foral de Medio Natural y Agricultura. Foto: DFB
La Diputación Foral de Bizkaia ha aprobado su Plan Anual de Prevención, Vigilancia y Extinción de Incendios Forestales para 2026, reforzando un modelo que ha convertido al territorio en una referencia en gestión forestal y prevención. Bizkaia vuelve a apostar por un dispositivo profesional, estable y operativo todo el año, y por una estrategia basada en anticiparse al fuego más que en reaccionar a él.
Con una superficie forestal de 158.026 hectáreas (el 75% de propiedad privada) y una de las densidades de población más altas de Europa (528 habitantes por km cuadrado), Bizkaia combina un territorio forestal con un entorno urbano cercano. Esa singularidad exige planificación, inversión continua y cultura de prevención.
En los últimos años, Bizkaia ha registrado un bajo número de incendios forestales y una mínima intencionalidad. El municipio de Karrantza es el único donde se suelen superar los cinco incendios al año, principalmente ligados a quemas para la regeneración de pastos en época previa a la primavera.
Respuesta inmediata y labor preventiva
El dispositivo operativo para 2026 es permanente y se articula exclusivamente con personal público, tanto funcionario como de la sociedad pública Basalan, lo que garantiza estabilidad y respuesta inmediata los 365 días del año. Estará formado por 15 retenes de extinción de seis personas, 5 equipos móviles de vigilancia, 10 autobombas forestales, 15 técnicos especialistas y el apoyo de los 8 parques de bomberos forales, cuya coordinación se centraliza en el centro Bizkaia Prest.
Este modelo se apoya además en el sistema INFOBI (Incendios Forestales de Bizkaia), que integra a agentes forestales y personal técnico del Servicio de Montes, Bomberos de la DFB y especialistas de Basalan. Su actuación conjunta ha sido clave en los últimos años para responder de forma rápida y eficaz, evitando daños mayores incluso en episodios de riesgo elevado y consolidando la capacidad operativa del territorio.
La labor preventiva será otro eje fundamental del plan. A lo largo del año, y como viene siendo habitual, se llevarán a cabo actuaciones de gestión forestal activa: desbroces, podas y clareos en repoblaciones jóvenes, así como trabajos de mejora en áreas silvopastorales y la construcción y mantenimiento de 200 kilómetros de pistas forestales mediante medios propios. Estas actuaciones cuentan con un presupuesto de 1 millón de euros para montes públicos, complementado con ayudas dirigidas a propietarios forestales privados. Gracias a esta gestión sostenida durante décadas, el territorio no requiere la creación de cortafuegos ni balsas artificiales, ya que el paisaje en mosaico y la accesibilidad forestal actúan como cortafuegos naturales.
Regulación del fuego
El plan prevé la regulación diaria del uso del fuego en función del índice de riesgo, con restricciones automáticas en episodios de alerta naranja o roja y especial vigilancia en jornadas con viento sur superior a 25 km/h u olas de calor, cuando el riesgo aumenta. Además, se reforzará la vigilancia y se podrán limitar actividades y circulación en pistas forestales si las condiciones meteorológicas lo exigen.
Finalmente, Bizkaia reforzará también la sensibilización social mediante campañas informativas dirigidas a ayuntamientos, centros escolares y ciudadanía, fomentando una cultura de uso responsable del fuego en entornos rurales y forestales.
