GUÍA DE LA INNOVACIÓN EN EL PAÍS VASCO 2022 "Innovación en su justa medida"

Javier Mata, director general de Bultz-lan

Javier Mata, director general de Bultz-lan

Hablar de innovación disruptiva normalmente nos hace pensar en las grandes compañías tecnológicas internacionales, Amazon, Whatsapp, Netflix, etc., que aparecieron no hace muchos años, y hoy son lideres y referentes a nivel mundial de sus sectores de actividad, habiendo hecho desaparecer a marcas conocidas y reconocidas durante muchos años, o en su caso, hacer adaptarse a las innovaciones lanzadas por ellos a las empresas que eran líderes en el mercado siguiendo su nueva forma de ofrecer productos o servicios.
En este escenario, creo que hay que recordar que no todas las innovaciones disruptivas tienen que ser tecnológicas, aunque la mayoría de los ejemplos y más conocidos lo sean, lo cual es importante a la hora de plantearse retos en nuestras empresas.
Desde mi punto de vista también es importante no centrar la innovación disruptiva en productos o servicios más baratos, puede ser una consecuencia, pero no debe ser el fin, si no enfocar los procesos de innovación hacía las áreas de mejora de procesos y estructura y generar nuevos modelos de negocio. Como consecuencia llegarán otras cuestiones ligadas a la innovación disruptiva como son el crecimiento y el evitar la competencia directa de los operadores tradicionales.
El equivocar la importancia de estas cuestiones puede dar lugar a dificultades en el futuro si fijamos la innovación en precios baratos y crecimiento puede ser difícil la sostenibilidad en el futuro del proyecto. Hay que tener en cuenta también, que estamos en un mundo en que las innovaciones que se traducen en productos o servicios nuevos, no siempre se asientan y en ocasiones, aunque lo hagan se puede dar casuística de que ya no tienen una permanencia tan duradera en liderazgo del mercado que anteriormente tenían las mismas. Como ejemplo la evolución de las tendencias en usos de redes sociales (TikTok, Instagram, Facebook, …) es una cuestión a vigilar dependiendo en qué se base el modelo de negocio.
Sin olvidar la tecnología, que debe ser un medio y no un fin, también se puede hacer innovación disruptiva aportando mayor valor añadido y no solo precio, poniendo el foco en temas tan importantes como el medio ambiente o resolver problemáticas sociales que además el mercado valora en la actualidad tan positivamente y que incluso en ocasiones puede pagar mejor.
Es verdad, que dado el tamaño de la mayoría de las empresas de nuestro entorno en muchas ocasiones es difícil afrontar este tipo de innovación. Por ello, debemos perder el miedo a abordar estos procesos en colaboración, porque el win-win puede hacernos crecer a ambos, y obtener esa ventaja competitiva que mejore el producto o servicio que ofrecemos. Esta colaboración debe darse de diferentes formas, creación de startups, empresas ya asentadas en el mercado con startups o porque no entre empresas ya solventes que quieran dar un paso adelante.
De todas formas, en mi opinión, también hay que tener en cuenta que aunque a veces miremos a las empresas industriales “tradicionales”, que llevan muchos años entre nosotros, como si estuviesen ancladas en el pasado creo que es obvio que algunas innovaciones han aplicado en sus trayectorias y posiblemente muchas de ellas en su momento disruptivas, aunque ahora ya estén incluidas en sus procesos como algo común y sin notoriedad que tiene que ser el objetivo final de toda innovación, ser útil a la empresa en el producto o servicio que realiza.

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