Euskadi cerró 2013 con un descenso de la siniestralidad laboral y un incremento en el número de enfermedades profesionales declaradas, aspectos ambos que hablan positivamente de las políticas y gestión de la prevención de riesgos desarrolladas desde el ámbito institucional y empresarial. Pero pese a que desciende el número y la gravedad de los accidentes en el puesto de trabajo, preocupa a los expertos la necesidad de poner coto a los riesgos psicosociales, origen de no pocas enfermedades profesionales y responsables en buena parte de los altos niveles de absentismo laboral existentes en la CAV. Según datos publicados por el Instituto vasco
La necesidad constante de transformación se vuelve más imperiosa en momentos de crisis como el actual, en el que las actividades económicas deben evolucionar e incluso en ocasiones son sustituidas por otras más sofisticadas. En este camino las empresas avanzan hacia la excelencia, grado último en el que es necesario continuar innovando para mantener el crecimiento y la competitividad. Así, con el esfuerzo de las empresas y el impulso de las instituciones, Euskadi, donde la industria avanzada se presenta como tractora del resto de los sectores económicos, avanza hacia una estructura productiva más innovadora e intensiva en conocimiento, que