“Las empresas vascas han demostrado su capacidad de adaptación apostando por la tecnología en plena crisis”

Jesús Valero, director general de Tecnalia

Jesús Valero, director general de Tecnalia

En Tecnalia nos gustan los problemas, porque cualquier problema es una oportunidad para investigar, para resolver lo desconocido y descubrir soluciones únicas con las tecnologías más sofisticadas. Son los problemas los que nos obligan a ser ingeniosos y creativos; es de los problemas de donde surgen las mejores ideas; y son los problemas los que nos convierten en personas y equipos especiales. Esa es la forma de poder impactar en la sociedad y en las empresas con las que colaboramos. 

Y porque nos gustan los problemas, 2022 ha sido todo un reto para nosotros. La I+D es la herramienta para hacerles frente cuando ya no tenemos otra forma de abordarlos. En las crisis la innovación y la tecnología son a menudo la tabla de salvación. Las empresas vascas han demostrado resiliencia, adaptación y esfuerzo para hacer frente a esta nueva realidad y una de las claves ha sido sin duda su actitud innovadora. Necesitamos empresas así. 

Desde Tecnalia creemos que se está produciendo un cambio en nuestra sociedad, que tanto las empresas como las administraciones entienden que la innovación es clave para garantizar nuestro futuro. Buena muestra de ello es que, en 2022, Tecnalia, como máximo exponente de la I+D vasca, ha contado con la confianza de empresas y administraciones. 

Tecnalia lo conformamos 1.464 personas, expertas, creadores, soñadores que ayudamos con nuestra capacidad tecnológica a que las empresas integren las tecnologías en sus productos y procesos productivos. Así, en el último año, hemos superado la colaboración con más de 1.200 empresas, el 73% de ellas, pymes. Somos una herramienta al servicio de las empresas y de la sociedad, y estamos volcados en las grandes tendencias de la sociedad, en los ámbitos de la Transformación Digital, Fabricación Inteligente, Transición Energética, Movilidad Sostenible, Ecosistema Urbano, Salud Personalizada y la Economía Circular. 

Afrontamos 2023 con el compromiso y la responsabilidad de garantizar que nuestra actividad, de la mano de las empresas e instituciones, y con la firme convicción de que la colaboración público-privada nos hace más fuertes, sume y aporte valor en el ámbito económico y social, teniendo en cuenta su repercusión en el Medio Ambiente. 

Y es que todos nuestros esfuerzos tienen que estar ahora volcados en un futuro más sostenible, con la tecnología como aliado para hacerlo realidad. En este sentido, nuestro papel con la descarbonización, que engloba todos nuestros proyectos, es incuestionable. Debemos, por un lado, ser ejemplo y punta de lanza en nuestro propio proceso de descarbonización, y por otro, ayudar a las empresas a llevarlo a cabo.

Va a ser un año complejo, con un incremento de costes por la inflación y las consecuencias derivadas de la crisis energética y de suministros, que afecta de una u otra forma a todos los sectores. Pero la innovación es la llave para adaptarse, y debemos adelantarnos y dejar de recurrir a la I+D como alternativa y entenderla como una necesidad. Nuestro tejido empresarial está formado en su mayoría por pymes, que necesitan innovación de proceso, producto y servicio para ser competitivas hoy, mañana y en el futuro más lejano. Es necesario, por ello, que la innovación forme parte de la estrategia, no solo de la solución. 

Por ello, nuestro principal objetivo es ayudar a innovar a las empresas y a colaborar en la creación de un tejido industrial fuerte para conseguir una sociedad no sólo más próspera, sino también más sostenible y mejor adaptada a los retos del futuro, el futuro de todos nosotros.

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