“Euskadi, un paso hacia delante en economía circular”

Alexander Boto, director general de Ihobe

Alexander Boto, director general de Ihobe. Foto: Ihobe

La reciente Cumbre Mundial del Clima-COP27 ha concluido con un escaso avance para lograr un futuro libre de combustibles fósiles. A pesar de que los gobiernos reunidos en Egipto no han sido capaces de llegar a un acuerdo para eliminar su utilización de manera progresiva del escenario energético, estas cumbres son más necesarias que nunca ya que permiten la revisión de los avances sobre los compromisos adquiridos en materia climática y una rendición de cuentas ante la comunidad internacional. Si bien, deberían de ser redefinidas para dar más peso a las regiones, ya que en la actualidad no se las tiene en cuenta a pesar de que son los gobiernos regionales, junto a la Administración local, las instituciones encargadas de ejecutar más del 70% de las medidas de mitigación y adaptación.
Frente a esta inacción, Europa –y, con ella, Euskadi– tiene fecha para ser neutra en emisiones de gases de efecto invernadero: 2050. La descarbonización es un horizonte hacia el que la economía vasca avanza decididamente gracias al compromiso de colaboración público-privada que existe entre las instituciones y el tejido industrial.
La crisis energética ha situado a las empresas en un escenario complicado. Es el momento de adaptarse y de esto nuestro tejido industrial sabe mucho. Así ha quedado demostrado en el congreso Basque Circular Summit 2022, organizado por Ihobe en Irún, un foro dedicado íntegramente a la aplicación de modelos circulares en diferentes sectores industriales, en el que más de 800 especialistas han analizado y debatido los futuros requerimientos del mercado europeo en materia de economía circular.
En este encuentro se ha puesto de relevancia la elevada dependencia de los recursos que tiene Euskadi, ya que importamos más del 75% de los materiales que consumimos. A esto se le añade que las materias primas representaban, antes de la actual crisis de suministros, el 61% de la estructura de costes de las empresas vascas.
En este contexto, buscar soluciones innovadoras dirigidas a reducir el consumo de materias primas y a incrementar la durabilidad de los productos sigue siendo una necesidad, tanto para Euskadi como para todo el continente. Con este objetivo, la Comisión Europea está lanzando una batería de instrumentos, en el marco del Pacto Verde, que van a suponer una fuerte implicación para Euskadi, ya que el foco está puesto en sectores ampliamente representados en nuestro tejido industrial, como son el transporte, la energía, la edificación, la siderurgia, el cemento y los productos químicos. De hecho, estas cadenas de valor representan alrededor del 50% del PIB de Euskadi.
Las oportunidades que ofrece la economía circular van a ser claves para las empresas vascas y, para ello, el Gobierno Vasco ha diseñado su propia hoja de ruta económica y medioambiental: el Pacto Verde de Euskadi-Euskadiko Itun Berdea. Una hoja de ruta adaptada a nuestro contexto que deberá transformar nuestra economía en una economía moderna, competitiva y eficiente en el uso de los recursos. No es solo una apuesta climática o una política ambiental. Es un modelo con la industria como motor económico y con la innovación como principal palanca transformadora que está empezando a dar sus frutos. La economía circular ya representa en Euskadi unos ingresos brutos anuales de alrededor de 800 millones de euros y más de 18.000 personas empleadas en este ámbito.
El avance que está experimentando nuestro territorio en materia de economía circular está siendo posible gracias a la participación de todos los agentes implicados, tanto públicos como privados, a través de modelos de colaboración efectivos como los que representan el Basque Ecodesign Center, alianza público-privada entre el Gobierno Vasco y 16 grandes empresas; el programa PYME Circular Euskadi, para apoyar a las pequeñas y medianas empresas; el Basque Circular Hub, iniciativa de formación y transferencia de conocimiento y de fomento del empleo verde, y el Programa de Ecoinnovación Circular.
El lema del Basque Circular Summit 2022, ‘Walking the talk’, ‘predicar con el ejemplo’, refleja con rotundidad la vocación de Euskadi de presentarse como región europea referente en la aplicación de modelos circulares de negocio.

Más noticias de Opinión / Iritzia