GUÍA DE LA INNOVACIÓN EN EL PAÍS VASCO 2023 “Cooperativismo e innovación: transformando el futuro”

Rosa Lavín, presidenta de Konfekoop

Rosa Lavín, presidenta de Konfekoop

El mundo se mueve a un ritmo vertiginoso, con avances tecnológicos y cambios sociales y económicos que afectan a todas las esferas de la vida. Nos enfrentamos a desafíos urgentes relacionados con el agotamiento de recursos naturales, la neutralidad climática y la desigualdad social. En este contexto, las empresas cooperativas emergen como actores clave para promover un desarrollo sostenible y construir un futuro más equitativo donde impere la justicia, la solidaridad y la intercooperación, sin dejar de lado la competitividad.

Las empresas cooperativas desempeñan un papel fundamental en la promoción del desarrollo sostenible y el modelo cooperativo sostenible del futuro representa una visión inspiradora de cómo las empresas cooperativas pueden desempeñar un papel central en la construcción de un mundo más sostenible e igualitario. La Unión Europea ha aprobado recientemente una recomendación en la que aboga claramente por fomentar la economía social, cuyo máximo exponente son las cooperativas, como un modelo de empresa que contribuye a alcanzar los retos económicos, sociales y medioambientales a los que tenemos que hacer frente.

Lo cierto es que nuestra forma de ser y de hacer son una guía y ejemplo para otros modelos de empresas. La innovación se ha convertido en una necesidad para mantenerse relevantes y líderes en un entorno empresarial en constante evolución y las cooperativas llevan años a la vanguardia de las transformaciones. Porque la relación entre la innovación y la transformación en el cooperativismo es bidireccional. La innovación es un motor para la transformación, pero la transformación es esencial para fomentar la innovación. 

En Euskadi, la economía cooperativa tiene tasas de innovación superiores al resto del tejido empresarial vasco; estas tasas de innovación industrial y social son una palanca y elemento diferenciador y traccionador de desarrollo económico, y un elemento de competitividad para nuestra economía.

Para lograr una transformación significativa, las cooperativas se cuestionan constantemente las prácticas establecidas y están abiertas a nuevas ideas. Desde revisar y renovar la estructura de gobernanza de la cooperativa, a la adopción de nuevas políticas y protocolos internos, pasando por la inversión en programas de formación y recualificación para personas socias y empleadas, contribuyen a crear un entorno propicio para la innovación. La colaboración y el intercambio de conocimientos se vuelven asimismo fundamentales para fomentar un ambiente de innovación en nuestras empresas, en definitiva, trabajar/practicar la intercooperación.

Porque la cultura de la innovación está intrínsicamente unida al cooperativismo. Las cooperativas promueven en sus empresas una cultura de innovación, fomentando la participación activa de las personas socias y empleadas en la búsqueda de soluciones creativas a los desafíos que se enfrentan. Al mismo tiempo, la transformación de la estructura y las prácticas internas es esencial para crear un entorno que fomente la innovación, y nuestras empresas lo hacen a diario.

Para las empresas cooperativas la innovación no es una opción, es parte de nuestra cultura; la transformación social y el desarrollo económico a través de la innovación es la clave para asegurar que el cooperativismo siga siendo relevante en las décadas venideras, y, para ello, como en una larga travesía de montaña, se trata de avanzar de manera constante día a día. Las empresas cooperativas somos agentes de cambio positivo en un mundo que necesita urgentemente soluciones sostenibles. El futuro de las empresas cooperativas es prometedor, y nuestra contribución al desarrollo sostenible es esencial para abordar los desafíos globales a los que nos enfrentamos y los que vendrán. Porque sólo innovando transformaremos el futuro.

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