La empresa de consultoría Sharp, fundada en 2009, centra su propuesta de valor en aportar soluciones desde la cercanía y el conocimiento de sus clientes. Los socios de la firma, Rocío Carreter y Jorge Beschinsky, son profesionales con una dilatada experiencia en el mundo de la empresa. Carreter gestionando recursos humanos y Beschinsky dirigiendo empresas. Por ello, se centran en aportar valor, más allá del servicio tradicional de consultoría, anticipándose a las necesidades de sus clientes. Con sede en Vitoria-Gasteiz, está aumentando su carga de trabajo en Euskadi, sobre todo en servicios relacionados con los recursos humanos, uno de sus “puntos fuertes”.

¿Qué balance hacen de su actividad en el País Vasco?
JB – En los inicios, nuestra actividad en el País Vasco era residual, ya que estábamos más ligados a proyectos nacionales e internacionales. Con el impulso de la actividad de RR.HH., en los dos últimos años hemos crecido sustancialmente a nivel local.
RC – Una parte importante del valor que aportamos en todos los servicios relacionados con recursos humanos, ya sean procesos de selección o asesoramiento, precisa de una gran cercanía y contacto, tanto con las empresas como con los candidatos. Por eso, en esta última etapa tenemos mucho más negocio en el País Vasco, aunque también en otras zonas como La Rioja, Navarra, Cantabria, Zaragoza o Andalucía. Lo cierto es que una gran parte del negocio de personas lo tenemos en Euskadi.

¿Qué servicios de consultoría ofrecen? 
RC – En lo que a RR.HH. se refiere, principalmente nos dedicamos a procesos de selección y reclutamiento. No obstante, tenemos un crecimiento importante en la demanda de servicios de consultoría y acompañamiento en lo que a la gestión de los RR.HH. en pymes se refiere. Damos servicios de apoyo al profesional que lo lleva de forma interna, en combinación con su gestoría. Y en los casos donde la gestión la hace directamente el gerente, estamos con él para asesorarle en el día a día con las dudas, problemas y situaciones que van surgiendo.
JB – Por otra parte, no hemos renunciado a nuestros orígenes y prestamos servicios de gestión, supervisión y estrategia a diversas empresas, principalmente industriales a nivel nacional. Desde servicios de ‘interim management’, hasta reflexiones estratégicas ante los retos permanentes a los que tiene que enfrentarse el tejido empresarial. Empresarios que ya están agotados tras dos grandes crisis y un entorno tan incierto que quieren retirarse, o empresas que no tienen sucesión o que no saben por dónde empezar su diversificación… En todos estos retos, acompañamos y asesoramos a los empresarios para que puedan tomar las mejores decisiones y no perdamos ni una empresa en el camino.

¿Cuáles son sus previsiones u objetivos para 2025?
RC - 2025 ha empezado con muchos proyectos en los servicios de RR.HH. y una carga de trabajo muy alta. Por una parte, tenemos clientes recurrentes que siguen depositando su confianza en nosotros y, por otra, el ‘boca-oreja’ va funcionando y nos llegan nuevos clientes con nuevos proyectos. La verdad es que nos estamos planteando la escalabilidad de la empresa, ya que vemos un crecimiento en la demanda de nuestros servicios. Nuestra clientela es muy diversa y va desde profesionales sanitarios, hasta talleres, industrias o empresas de servicios.
JB – En el resto de los servicios hemos consolidado nuestra colaboración con fondos de inversión y esperamos un crecimiento en torno al 20% en nuestra actividad de gestión. Como apunta Carreter, para nosotros es muy importante mantener la calidad del servicio y fidelizar a los clientes. Aquí nuestros clientes son industrias con presencia en sectores como la metalmecánica, la automoción, etc.

“Este año 2025 ha empezado con muchos proyectos en los servicios de recursos humanos y una carga de trabajo muy alta”

¿Cómo valoran la situación del sector de consultoría y el impacto de las nuevas tecnologías en el mismo?
JB – Las empresas han de centrar cada día más sus recursos en su propia propuesta de valor. Esto implica que cualquier actividad anexa a su ‘core business’ tenderá a ser externalizada. Por otra parte, los servicios profesionales demandan cada vez más especialización, por lo que siempre se conseguirá mayor eficiencia con ‘el especialista del ramo’. Por eso, vemos que la demanda seguirá creciendo para todo lo que no sea la propuesta de valor central de las pymes.
RC – En nuestro negocio, la inteligencia artificial nos permite mejorar y aligerar procesos, concentrándonos en las tareas de auténtico valor, aplicando el uso de nuestros conocimientos y experiencia. La tendencia de centrar los esfuerzos en el valor añadido es lo que nos aporta la IA; procesos mecánicos, convertir datos en información… todo para que podamos usar el tiempo en añadir valor para nuestros clientes y candidatos.

En el caso de los RR.HH., existe un debate en Euskadi sobre cómo atraer y retener talento...
RC – Es un debate a nivel global y, más que vinculado a un territorio, lo está a unas generaciones y a un momento histórico-social. Las prioridades individuales han cambiado, por una parte, y las empresas han evolucionado. A nosotros nos gusta decir que hay que captar y fidelizar el talento y para eso no hay una única fórmula, ya que no todo el mundo busca lo mismo. Creemos que es vital crear unas expectativas realistas en los candidatos para que, la realidad de su nuevo puesto no les defraude. Pero es igual de importante que las empresas tengan una política de personas, integrada en su estrategia, que permita el desarrollo personal y profesional de los trabajadores. No se trata de motivar única y exclusivamente con la política retributiva, es un ‘mix’ complejo que debe englobar el estilo de liderazgo, la cultura y el propósito de la empresa. Aquí es donde estamos viendo, cada vez más, que nuestro acompañamiento está aportando mucho valor a nuestros clientes, ya que, no solo captamos el talento adecuado, sino que conseguimos que se integren y desarrollen en la empresa. De esta forma, se reduce la rotación, se mejora el desempeño y se consigue un mayor compromiso del trabajador con el proyecto.