Una innovadora instalación analiza, en la granja modelo de Arkaute, la compatibilidad entre producción agrícola y energía solar
Esta tecnología permitirá a Euskadi avanzar en la transición energética sin poner en riesgo la actividad agraria, eje central del uso del suelo rural
- Estrategia Empresarial
- 24-Abril-2025

Neiker ha presentado en Arkaute la infraestructura agrovoltaica de cultivos herbáceos más grande del Estado, compuesta por 212 módulos fotovoltaicos distribuidos en 8.000 m². Foto: Irekia
Euskadi cuenta desde este jueves con una innovadora planta experimental agrovoltaica que permite testar la compatibilidad de una explotación agrícola en suelo rural y la producción energética renovable. La instalación, presentada este jueves en la sede del centro tecnológico Neiker en Arkaute (Araba) por la consejera de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca del Gobierno vasco, Amaia Barredo, y la directora general de Neiker, Olatz Unamunzaga, cuenta con una extensión de 8.000 m² que la convierte en la unidad experimental más grande del Estado en cultivos herbáceos.
La instalación agrovoltaica permitirá estudiar en condiciones reales la convivencia entre la producción energética solar y la producción agrícola sin comprometer la vocación productiva del suelo rural.
En total, se han instalado 212 módulos fotovoltaicos, que generarán anualmente 163.914 kWh, equivalentes al consumo eléctrico medio de 50 viviendas. La energía generada se empleará íntegramente para el autoconsumo del campus de Arkaute, lo que permitirá reducir de forma significativa la demanda eléctrica procedente de la red. De este modo, la instalación no solo contribuirá a avanzar hacia un modelo energético más sostenible, sino que también mejorará la eficiencia y autosuficiencia del propio centro.
Durante su intervención, la Sailburu Amaia Barredo ha subrayado que “estas instalaciones permitirán a Euskadi avanzar en la transición energética sin poner en riesgo la actividad agraria, que debe seguir siendo el eje central del uso del suelo rural. La energía solar debe complementar, no sustituir, la capacidad productiva del campo”.
Agrovoltaica
La instalación agrovoltaica consiste en el uso compartido de una misma superficie de tierra para actividades agrícolas y la generación de electricidad mediante energía solar. A través de esta solución innovadora, se pretende responder a desafíos principales del sector como la adaptación de la agricultura al cambio climático, la diversificación de los ingresos rurales o el uso eficiente del territorio.
La mitad de la superficie (4.000 m²) se instalará en la estructura agrovoltaica (producción agrícola e instalación de paneles solares) y la otra mitad se mantiene como zona de control con uso agrícola exclusivo. Este diseño permitirá analizar y comparar con precisión las diferencias entre el rendimiento de la producción agrícola en ambas zonas.
“La instalación nos posiciona estratégicamente para generar conocimiento técnico riguroso y contrastado que facilite al sector agrícola acceder a soluciones reales y adaptadas a sus condiciones. El objetivo es explorar si se puede compatibilizar la generación de energía con la producción de alimentos; si resulta viable, podría suponer una muy buena solución para nuestro sector”, ha señalado Olatz Unamunzaga.
Proyecto europeo
La nueva infraestructura servirá, además, como plataforma para el desarrollo del proyecto europeo AgriPower, liderado por Neiker, que tiene como finalidad ensayar sistemas agrovoltaicos inteligentes que mantengan la productividad agraria a la vez que optimizan el rendimiento energético. Para ello, se probarán diversos cultivos herbáceos arables, como la lechuga y la patata, bajo las estructuras agrovoltaicas, con el objetivo de evaluar su adaptación y sostenibilidad en combinación con la generación de energía solar.
En este sentido, Amaia Ortiz, responsable del Departamento de Producción y Protección Vegetal de Neiker y coordinadora del proyecto, ha insistido en la importancia de generar datos científicos sólidos que permitan seleccionar adecuadamente tanto los cultivos como los diseños de instalación, garantizando su sostenibilidad desde el punto de vista agrícola, energético y económico.
“El sector necesita evidencias reales, obtenidas en condiciones de campo, para poder tomar decisiones bien fundamentadas. Además, estos datos serán clave para diseñar modelos de gobernanza eficaces que faciliten una implantación responsable de la agrovoltaica”, ha señalado Ortiz.
El proyecto, que se desarrolla en colaboración con entidades de Euskadi, Navarra y Nueva Aquitania, incluye ensayos de campo en condiciones reales, una revisión metodológica, el desarrollo de herramientas de apoyo para productores y la elaboración de un informe con recomendaciones de política pública para fomentar la implantación segura y eficaz de la agrovoltaica en Iparralde.
“La agrovoltaica representa una oportunidad para afrontar simultáneamente varios retos: la transición energética, la adaptación al cambio climático, la sostenibilidad económica de las explotaciones y la compatibilidad entre la producción de alimentos y la generación de energía”, ha concluido la investigadora.
Neiker es una entidad dependiente del Departamento de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca del Gobierno vasco, y su actividad está orientada a dar respuesta y a apoyar las estrategias que el Ejecutivo Vasco diseña para la promoción, desarrollo y gestión del sector agroganadero y forestal de Euskadi.