Paturpat convertirá residuos del procesado de la patata en bioplásticos
- Estrategia Empresarial
- 11-Junio-2025

Representantes de las empresas y centros tecnológicos que participan en la iniciativa, enmarcada dentro del proyecto europeo Brilian, en la planta de Udapa en Gasteiz. Foto: Udapa/Paturpat
Las instalaciones de la cooperativa agroalimentaria Udapa/Paturpat, ubicadas en Vitoria-Gasteiz, son el epicentro de un innovador proyecto para convertir residuos del procesado de la patata en bioplásticos circulares. En el mismo participan también la empresa aragonesa Tecnopacking, experta en envases sostenibles, y el centro tecnológico AITIIP, especializado en transformación de plásticos.
Esta iniciativa incluye la construcción y puesta en marcha de una planta piloto de extracción de almidón a partir de subproductos de patata, que puede ser transformado en termoplástico biodegradable. Este componente se utiliza luego en el desarrollo de films biodegradables para embalaje flexible y acolchado agrícola en suelo, contribuyendo así a sustituir materiales plásticos convencionales por soluciones circulares y de origen local.
El núcleo del proyecto es la construcción y puesta en marcha de una planta piloto de extracción de almidón a partir de subproductos del tubérculo
Esta propuesta forma parte del proyecto europeo Brilian, financiado por la iniciativa Circular Bio-Based Europe (CBE JU) en el marco de Horizonte Europa, que ha lanzado oficialmente su piloto español en Udapa/Paturpat. Con el mismo se busca demostrar cómo la bioeconomía circular puede convertirse en un motor de desarrollo sostenible y generación de nuevas oportunidades industriales en entornos rurales, poniendo a los productores primarios en el centro de la transición.
Coordinado por el centro tecnológico aragonés Circe, Brilian tiene como objetivo transformar estos retos en oportunidades, impulsando modelos de negocio cooperativos sostenibles que permitan a las agroindustrias y agricultores diversificar sus ingresos mediante la valorización de subproductos y residuos agroalimentarios. El proyecto validará en total 10 cadenas de valor bio-basadas en España, Italia y Dinamarca, centradas en materias primas locales como cardo, girasol y colza, además de patata, con aplicaciones en sectores de alto valor añadido como bioplásticos, biolubricantes, bioadhesivos, alimentación animal y biofertilizantes. Con un presupuesto superior a los seis millones de euros, cuenta con la participación de 13 socios de seis países.