El Gobierno vasco y las tres diputaciones forales están diseñando planes para la transición en los cuidados, para consolidar “un modelo más personalizado”, tanto en residencias de personas mayores como en el hogar. Una estrategia que también se afronta desde la iniciativa privada, que atiende, asimismo, una demanda creciente debido al progresivo envejecimiento de la población vasca en lo que se empieza a conocer como ‘invierno demográfico’.
La Diputación Foral de Bizkaia tiene prevista una inversión de 185 millones hasta 2023, que busca“mejorar la atención a las personas que necesitan cuidados de larga duración, adaptar esa ayuda al siglo XXI, modernizar el sistema foral de atención, introducir la tecnología en él y la cercanía a los usuarios”. El plan contempla unidades de convivencia de hasta 25 personas en los centros residenciales, que favorezcan “una atención más personalizada y que sean lo más parecido al hogar”.

Adinberri construye en Pasaia un gran centro, que será referencia en envejecimiento y dependencia

En Gipuzkoa, la fundación pública Adinberri es la encargada de llevar a cabo la estrategia innovadora de la Diputación Foral para maximizar el potencial de innovación al servicio del envejecimiento saludable. Adinberri trabaja bajo un modelo de gobernanza colaborativa con los agentes de ecosistema y los principales grupos de interés: la sociedad, el sistema sociosanitario y el tejido empresarial. Recientemente, la Diputación ha adjudicado por 66,4 millones de euros la construcción del nuevo centro Adinberri en Pasaia, el proyecto foral más ambicioso “en la última década”, que será “referencia en envejecimiento y dependencia”. El centro, que generará 400 puestos de trabajo, será un conjunto de edificios que albergará una residencia para personas mayores con 142 plazas, 18 apartamentos tutelados (22 plazas) y un centro de día con 30 plazas, todo ello “dotado de servicios innovadores y punteros desde la óptica de la atención”.
En Álava entró en funcionamiento a principios de este año  Arabarren, que añade a la oferta asistencial de la Diputación Foral 100 nuevas plazas para personas mayores, 25 de Centro de Día y otras 25 para personas con discapacidad física severa, generando así una nueva oferta integral, con una gestión basada en el modelo cooperativo.