La Junta General Ordinaria que CAF (Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles) celebró este pasado 14 de junio en su sede de Beasain no hizo sino trasladar la magnífica fotografía de la que presume la empresa guipuzcoana, aparentemente inmune al contexto de incertidumbre geopolítica global que afecta a buena parte del tejido empresarial vasco. Con un excelente nivel de contratación en el inicio del año y una cartera de pedidos que supera los 15.000 millones, lo que representa un nuevo récord en la historia de la compañía, las expectativas presentadas ante los accionistas de cara a este 2025 son de volver a crecer a doble dígito en las ventas, además de mejorar la rentabilidad de la empresa. La propuesta de reparto de dividendo por acción, que se trasladó a la masa accionarial respecto al resultado de 2024, saldado con 4.212 millones en ventas y un beneficio neto de 103 millones,  fue de 1,34 brutos por título. 
1.118 millones en ventas
A la espera de la publicación de los resultados del primer semestre de 2025, que tendrá lugar el 28 de julio, el balance de los tres primeros meses del año es difícilmente mejorable: 2.026 millones de euros en contrataciones (1.510 de los mismos pertenecientes al sector ferroviario) han elevado un 6% la cartera de pedidos de la compañía, situándola por primera vez por encima de los 15.000 millones (15.603), 13.885 procedentes del ámbito ferroviario. Si la cartera de pedidos de CAF vuelve a marcar un récord, el resto de los indicadores del comportamiento de la sociedad no le van a la zaga en este primer trimestre de 2025. Las ventas (1.118 millones) han crecido a doble dígito (11%), siendo 875 del negocio ferroviario; el resultado neto, 36 millones, se ha elevado un 53% respecto al año pasado y el EBIT, 57 millones, un 21%. Todo ello apunta, como se constató en la Junta, a un 2025 en el que se prevé hacer crecer las ventas a doble dígito. 

El contexto arancelario no altera el Plan Estratégico de la compañía debido a su baja exposición al mercado de Estados Unidos en el que, además, ya está implantada

EE.UU., ‘core market’
Ni siquiera el terremoto que ha supuesto la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump ha afectado al comportamiento de CAF, debido a la baja exposición de la firma a dicho mercado. Únicamente el 6% de la cartera de clientes de la compañía beasaindarra procede de Estados Unidos y, además, hace ya casi 30 años, implantándose en Elmira (Nueva York) en 1998, que CAF resolvió la obligación que impone el ‘Buy American Act’ de que los proyectos financiados con fondos federales cuenten con un contenido local mínimo del 70%. Estados Unidos, en cualquier caso, sigue siendo considerado un ‘core market’ en el Plan Estratégico de CAF al que, en cualquier caso, el actual entorno arancelario no altera su enfoque.